La compañía eléctrica estatal hondureña, Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), constituye el principal desafío financiero, ambiental y de transparencia para la sostenibilidad y el desarrollo del país. Pérdidas anuales de energía oscilando entre USD 400 y USD 600 millones -que representan alrededor del 5% del Presupuesto General de la República para 2021-, procesos de contratación mal dirigidos o con base en decretos legislativos que imponen condiciones que resultan en contratos no competitivos o con irregularidades (como ampliaciones de plazo de vigencia y otros), altos niveles de mora, un contrato fallido con Empresa Energía Honduras (EEH), y una gobernanza y finanzas deficientes son factores que contribuyen a la degradación continua de la ENEE. Aunque la problemática de la ENEE tiene un gran impacto en las finanzas del país y en el bolsillo del pueblo, este es uno de los temas que menos atención ha tenido de la ciudadanía, el gobierno, organizaciones de sociedad civil, y el sector privado. En ese sentido, ASJ considera que el contexto previo a las elecciones generales de 2021 es una oportunidad clave para que los candidatos(as) políticos y posibles próximos gobernantes se comprometan a buscar soluciones reales y sostenibles a la problemática en el subsector eléctrico de Honduras. A continuación, presentamos una lista de problemas y soluciones específicas para asegurar un comienzo en el rescate del subsector eléctrico. Esto insumos fueron creados como resultado de una videoconferencia patrocinada por ASJ, en la cual participaron expertos como José Manuel Arriaga Yancamán, Luis Cosenza Jiménez, y Dante Mossi -quien también representaba el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE)-. Además, el evento contó con la asistencia de representantes de otros organismos multilaterales como el Banco Mundial (BM) y Fondo Monetario Internacional (FMI)